24 de marzo de 2011

UNA CAUSA REAL




En relación con el POST anterior El talento fluye,  se publicó recientemente en el diario El mundo el artículo ¿Hay empresas para toda la vida?. Días contados para la lealtad empresarial.
Al leerlo detenidamente me di cuenta de que se utilizaban indistintamente los términos fidelidad y lealtad. Ésto llamó mi atención y pedí la opinión de mi maestra María Clavel . Partiendo de aquella conversación,  he  averiguado que  existen diferencias significativas entre ambos términos.

La fidelidad tiene que ver directamente con una persona.
La lealtad tiene que ver directamente con una causa (entendida como una visión compartida)
Puedes ser leal aunque no fiel porque crees en la causa y no en la persona.
La fidelidad tiene que ver con el amor.
La lealtad tiene que ver con lo legal (de hecho es la raíz etimológica de lealtad). Cuando se es fiel a alguien se está dispuesto a perdonar errores y defectos, siendo consciente de que tales cosas se superarán. El leal conserva la capacidad de crítica cuando no está de acuerdo y podrás contar con él en momentos de necesidad.
La fidelidad tiene que ver con el corazón.
La lealtad tiene que ver con la razón.
La fidelidad tiene que ver con promesas.
La lealtad tiene que ver con acuerdos.           
La fidelidad tiene que ver con “sometimiento”.
La lealtad tiene que ver con consentimiento.
El fiel nunca hablará mal de aquel a quien es fiel,  y no hará nada que denigre a esa persona. El leal, aunque no se someta a alguien puede seguir haciendo lo que le enseñó como causa, es decir, sigue haciendo la tarea más allá de la persona.
(buenastareas.com)

En mi opinión, es el tandem formado por ambas lo que produce un efecto poderoso en las relaciones humanas.

El artículo prosigue destacando a  organizaciones como Nestle´, Siemes, Bayer o REE en las que trabajan plantillas con una antigüedad superior a los 10 años.
 ¿Cuál es el secreto para esta lealtad?  -se pregunta en el artículo-.
Me llama poderosamente la atención,  que se identifique antigüedad con lealtad.
Me suscita curiosidad pensar que se identifique la causa a la que ser leal con la competitividad de la empresa y su permanencia en el mercado.
En mi opinión, es – o podría ser- un instrumento o canal,  para una causa más amplia y compartida. Y en este caso, los empleados podrían trabajar en cualquier otra empresa y seguir siendo leales a la causa.

Desde mi punto de vista, el Quid para ampliar la visión ante la situación actual y su consiguiente transformación, estriba en detectar y focalizar la causa real a la que ofrecemos nuestro talento.

Además, a lo largo del mencionado artículo, se citan como ingredientes clave para garantizar la “lealtad” de los empleados : compromiso, entusiasmo, flexibilidad y crecimiento.
Aquí los desarrollo según mi visión:

        - Compromiso.  Com- plantea una relación, el -pro-, una disposición y -miso, una misión que hay que realizar. Es decir, me dispongo contigo para realizar una misión o tarea    concreta.
Esto significa que es necesario poner en juego todas nuestras capacidades para llevar adelante aquello en lo que nos hemos involucrado.
El empleado se compromete consigo mismo poniendo todo su interés y sus esfuerzos al servicio de la causa, y con la empresa que le está sirviendo como medio para tal fin.
El compromiso empresarial significa explícita o implícitamente el compromiso  profesional de poner a disposición la estructura y canalización necesaria al servicio de la causa (una vez enfocada) y al empleado mismo. Entendiendo que éste es parte fundamental para realización de una visión a través del desarrollo de una misión u objetivos particulares.

        - Entusiasmo. Como dice Javier Sánchez (responsable de desarrollo y formación de Vodafone): “el fomento del talento requiere de entusiasmo en una doble dirección” 

         - Flexibilidad y conciliación (en contraposición al presentismo y la visión unifocal). Entiendo que es importante tomar conciencia de que en el desarrollo y expansión del ser humano no sólo interviene el trabajo. El empleo profesional es sólo una de las áreas a las que atender.
Para su realización y completo desempeño, el ser humano necesita nutrirse de otras áreas igualmente importantes. La familia, los amigos, de sí mismo.
La atención a todas las áreas posibilita el equilibrio e integridad que nos permite fluir y alcanzar la excelencia. 

         -Posibilidad de crecimiento o expansión profesional. La actitud  y disposición de servir a la detección y amplificación de fortalezas. A la toma de conciencia, aceptación y gestión de “debilidades” y “sombras”.

Efectivamente, la lealtad empresarial tiene los días contados ( al menos tal y como se desprende  del artículo).

Desde aquí propongo que demos paso a la lealtad a la causa humana global;  conscientes de una continua transformación e innovación hacia nuevos paradigmas que nos permitan la consecución de una visión compartida.

Mª Carmen González
Economista de talentos

3 comentarios:

  1. Excelente artículo. Me he tenido que emplear a fondo para seguirlo, lo cual sucede rara vez, y lo agradezco. Interesantes reflexiones.

    Gracias por compartir.

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  2. Muy interesante y enriquecedor artículo, me lleva a pensar en ejemplos cercanos a mí de "lealtad" de más de 30 años a la misma empresa (una de las citadas más arriba precisamente), siendo aquella entendida entonces como diametralmente opuesta a la conciliación y la flexibilidad familiar.

    Gracias por tu visión expansiva e integradora, un soplo de aire fresco del que disfruto al leerte una vez más.

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  3. Muchas gracias por vuestras aportaciones que enriquecen sin duda mis reflexiones y acciones, mi mapa.

    Gracias por la voluntad de emplearte a fondo Javi, me ha resultado bastante complicado "transcribir" los links (el análisis) mentales al lenguaje. Aunque ya sabes, Pops.

    Efectivamente Laura, existen muchos ejemplos incongruentes cercanos. En cualquier caso, se trata de qué hacemos nosotros a partir de esos contra-modelos.

    Gracias por tu aportación Marieta, efectivamente habría mucho más que profundizar y afinar en ambos términos (fidelidad y lealtad) aunque no pretendía hacer un monoartículo de ellas, me sirven como puente para ahondar en otras cuestiones.

    Esto es sólo un acercamiento más, desde una visión más. En cualquier caso, está sujeto a la interpretación y experiencia de cada uno, por supuesto.

    Con las pinceladas que ofrezco, que cada uno elabore el cuadro que más le guste.

    Un abrazo y gracias por acoger en vuestra experiencia lo que comparto desde la mía.

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